¿Estamos todos? ¿Si? Pues entonces sigamos con el repaso de la saga Mega Man por donde lo dejamos.
Una vez terminada la parte de los juegos de NES, pasemos a ver las apariciones del otro héroe favorito de Capcom en la SNES.
Mega Man 7
Seis meses después de la puesta entre rejas del malvado Dr. Wily, cuatro de sus robots que estaban escondidos en su laboratorio, se activan para liberar a su creador. Por primera vez, en lugar de elegir fase desde un principio, empezamos directamente con Mega Man y Roll siendo conducidos por la ciudad hacia donde se encuentra un malherido Dr. Light con quién observan como finalmente Wily escapa de la cárcel. Después de vencer a un mini-boss, nos encontramos al fin con los nuevos personajes, Bass y Treble, que dice que él también va detrás de Wily.
Una vez terminada esta mini fase introductoria, ya podemos elegir enfrentarnos contra uno de los cuatro nuevos Robot Masters. Al acabar con todos pasamos por otra fase intermedia, tras la cual, Bass resulta herido y es llevado al laboratorio de Light en donde nos revela que realmente Bass era una creación de Wily. Tras enfrentarnos con otros 4 Robots Masters más, finalmente Mega Man se enfrenta tanto a Bass como a su creador. Mientras el robot azul duda si acabar de una vez por todas con Wily o no (ya sabéis, las leyes de la robótica), Bass aparece en último momento para salvar a Wily.
Las novedades en esta ocasión son la introducción de los dos nuevos personajes Bass y Treble, la vuelta de Rush como ayudante, además de una nueva habilidad llamada Rush Search que hace que nuestro amigo robótico-perruno busque ítems por los escenarios, el nuevo Super Adaptor que es una combinación de los dos Suits Adaptors del anterior Mega Man y la tienda de Auto, robot asistente de Light que nos venderá ítems y mejoras a cambio de tornillos. También se incluye un modo multijugador secreto y hace acto de presencia el viejo Proto Man, el cual tras vencerle, nos dará su escudo. Aunque los principales cambios se dan en el renovado aspecto gráfico gracias al cambio de plataforma.
El principal problema de este juego fue que tuvo que competir con otro de la franquicia que fue lanzado casi dos años antes, en 1993. Estoy hablando de Mega Man X. Mega Man 7 mantenía la tónica general de la denominada como «Saga Clásica» mientas que la nueva «Saga X» incluía muchas más innovaciones (nueva historia, nuevas habilidades, cambios en la jugabilidad, etc). Pero ya hablare más delante de la saga del robot X.
Pese a que la séptima entrega no fue mala, muchos lo consideraron inferior a X por esa vuelta a los orígenes sin muchas novedades.
Como apunte final, éste fue el último juego de la saga clásica que salió en exclusiva para una consola de Nintendo y a partir del cual, el robot azul fue visitando más plataformas de otras compañías. Cabe destacar que la siguiente entrega, Mega Man 8, no salió para ninguna consola de Nintendo.
Mega Man Soccer
Aprovechando el tirón que tenía Mega Man, en 1993, a los de Capcom se les ocurrió la genial idea de sacar un juego de… fútbol. Si, un juego de fútbol con el robot azul y algunos de los enemigos más famosos como jugadores. La (poca) historia trata sobre un partido de fútbol que es interrumpido por Wily y por unos cuantos de sus Robots Masters, y como no podía ser de otra forma, Mega Man decide pararles los pies.
En realidad el juego no tiene modo historia como tal, sino las típicas opciones de un juego de fútbol. Una vez elegido el modo, escoges una de las distintas formaciones y a los componentes de tu equipo, que pueden ser Mega Man (varios) o algunos de sus enemigos más famosos.
La idea no es mala, pero el pésimo control hace que el juego pierda mucha gracia. Vale que tenga tiros especiales que dependen de cada personaje, pero aun así se lo podían haber currado un poco más. Este Mega Man Soccer es un claro ejemplo de la explotación de la saga por parte de Capcom.
Mega Man And Bass
También llamado Rockman & Forte, este juego es un caso especial, ya que la edición de SNES no salió de Japón. No fue hasta su reedición para GBA cuando se pudo ver en el resto del mundo en el 2002, cuatro años después que la versión original.
El juego es una historia alternativa de Mega Man 8. En esta ocasión, el malo es un robot llamado King, que se adueña de la base de Wily y roba los datos de las creaciones del Dr Light del museo de robots. Por un lado, Mega Man va a frenar a este nuevo malvado. Por otro, Bass quiere acabar con él para demostrar que es el robot más fuerte. Pero como siempre, el que está detrás de todo el lío es Wily. Tras derrotar a King y a su creador, Wily revela que en realidad lo había hecho todo para probar la fuerza de Bass. Finalmente reaparece Proto Man para salvar la situación y le dice a Bass que aunque sea el más fuerte, nunca podrá ganar a su rival Mega Man porque no tiene nada por lo que luchar (que poético es nuestro Proto).
El principal cambio en este juego, es que al empezar debemos elegir con cuál de los protagonistas queremos jugar. Mientras que Mega Man mantiene sus capacidades de los anteriores juegos, Bass puede realizar disparos rápidos y continuos en siete direcciones distintas, pero no puede caminar mientras lo hace. Además también tiene la capacidad de realizar el doble salto, una de las habilidades de la saga X, el conocido Dash o impulso hacia delante. Otra de las grandes novedades, es la posibilidad de guardar la partida, dejando de lado al fin el sistema de passwords. También se incluye una base de datos sobre los personajes de toda la saga clásica que se va ampliando con los Cds que se encuentran repartidos por todo el juego. Por otro lado, tiene un nivel de dificultad bastante elevado, cosa que fue bastante criticada en el port que se hizo para la GBA.
En palabras del propio Inafune, este juego iba dirigido a los jóvenes jugadores que aún tenían una Super Famicom y que aún no habían vivido la experiencia de un Mega Man.
Saga World
El ojito derecho de Nintendo por esa época, la Game Boy, no se iba a quedar sin probar al robot azul más famoso. La saga Rockman World fue el paso del buque insignia de Capcom por la portátil más famosa. Aunque el nombre de estos juegos cambió en el resto del mundo, pasando a ser el primer World conocido como Dr. Wily’s Revenge y el resto con una numeración en números romanos a partir del 2.
Estos juegos se caracterizan porque reciclan contenido de sus lanzamientos anteriores, ya que los acontecimientos de todos ellos tienen lugar entre medias de las versiones de NES. Prácticamente son casi adaptaciones de los juegos de Mega Man del uno al cinco, pero por supuesto, con las limitaciones de la portátil.
Pero pese a usar casi todo de los otros juegos, incluyen unos nuevos enemigos finales, los Mega Man Killers, robots creados especialmente por Wily para aniquilar al robot azul. Estos Killers hacen acto de presencia en todas las entregas de Game Boy, menos en la segunda (Rockman World 2 o Mega Man II), en la que aparece Quint, quien en realidad es el propio Mega Man de un futuro pacífico al cual viaja Wily, que lo reprograma para sus planes.
El mayor cambio viene con la quinta y última parte de esta saga, ya que incorpora unos nuevos enemigos, los astrodroides, unos robots extraterrestres reprogramados por Wily para dominar el mundo. Como el clásico Mega Buster no les hace efecto, el Dr. Light lo mejora creando el Mega Arm. Además, Mega Man cuenta con un nuevo compañero, el gato robótico Tango (continúan las referencias musicales) que ataca a los enemigos.
Los nueve astrodroides tienen el nombre de un planeta del sistema solar, siendo su jefe Sunstar, que aunque se revela contra Wily, ataca igualmente a Mega Man porque piensa que los robots fueron creados para acabar con todas las razas inferiores. Tras derrotarle, el bueno de Mega Man le ofrece su ayuda, ya que él luchará para salvar la humanidad. Sin embargo, Sunstar rehúsa su ayuda y acaba explotando, destruyendo así la Wily Estrella, la base estelar de Wily, y poniendo fin a las aventuras del robot en la Game Boy.
Declive y renacimiento:
Tras el lanzamiento del Mega Man 8, pasaron 12 años hasta que pudimos disfrutar de otro título numerado de la saga clásica. Sin embargo, tanto la novena como la décima entrega, supieron a poco, y más cuando a finales del 2010, Inafune anunció su marcha de Capcom.
Con el tiempo, los dueños del «caballero de la armadura azul», fueron olvidándose poco a poco de la saga clásica, cancelando proyectos y haciendo cosas raras como poner al esperpento de la portada americana del primer Mega Man en un juego de lucha como representación de la saga. Si hasta el juego que sacaron para celebrar el 25 aniversario del querido robot fue creación de un fan…
Los seguidores de Mega Man, casi ya no teníamos esperanzas de que la situación cambiara. Pero no todo estaba perdido. Nintendo no iba a realizar una presentación como nos tenía acostumbrados en los últimos E3, sino que se limitaría a realizar un Nintendo Direct especial para la ocasión. Aunque se anunciaron grandes cosas, tenía la sensación de que faltaba algo más, y justo al final, soltaron el bombazo.
Cuando todo parecía haber acabado, presentan un nuevo personaje para el Smash Bros de Wii U y 3DS. Intento averiguar quién es, cuando de pronto la sombra se pone su mítico casco azul y una melodía resuena. Mega Man había renacido gracias a Nintendo. Habían hecho lo que los fans llevamos mucho tiempo pidiendo, la vuelta del clásico a nuestras vidas.
Al ver el escenario de la base del Dr. Wily, a Rush esperando para ayudar y a Mega Man usando las Metal Blades, algo se encendió dentro de mi. Mi vena de retro gamer latía con más fuerza que nunca. Creo que este vídeo de Brawl in the Family resume muy bien el sentimiento de todos los fans:
¿Qué futuro le espera a Mega Man más allá de este juego? ¿Quizás al fin se atrevan con el Mega Man Legends 3? No lo sé, pero deseo poder verle mucho más a menudo.
Pase lo que pase, dentro de nosotros, siempre estará el recuerdo de las aventuras del robot salvando el mundo y de como nosotros, le ayudamos a realizar esa ardua tarea. Los enemigos, los escenarios, la música… esos recuerdos tan especiales nos acompañarán toda la vida, aunque algunos se olviden de nuestro héroe de azul.
¡Larga vida a Rockman!